De mi contexto.

Estimados, como salta a la vista este blog es extremadamente personal. Tiene tantas aristas como su dueña. Son casi las 4 de la mañana y me encuentro sin una mínima pizca de sueño producto de un fin de semana de descanso, amigos, desenchufe y todo eso que tanto bien nos hace.

Al final, tengo mas vueltas que un ovillo. Dejo de lado explicaciones obvias y voy al punto de este post: resulta que desde hace un tiempito tengo dos recomendaciones para hacer. Una sobre cine y otra musical. Ambas recontrarequeteperomuymuy personales. La más profunda, solo a efectos de rotularla, es la de un director que me vuela la cabeza con sus metáforas, su visión, su fotografía, sus historias y respectivos personajes. Todo expuesto con simple complejidad, o debería decir compleja simplicidad?? es un juego de palabras, pero que en su cine tiene mucho sentido.

Por otro lado, está la musical. Ya sin tanta profundidad (o si). La verdad es que aunque a primera vista no lo parezca, en mi caso la elección termina siendo profunda. Luego de algo más de un mes de escuchar sistemáticamente la misma selección de música que tenía cargada en mi reproductor -el que me acompaña cada vez que salgo a la calle-, decidí cambiarla. Voy seleccionando música según los momentos, sensaciones y situaciones que voy transitando. Este cambio viene con carga de energía y eso se traduce en la música, o más bien se nutre de ella.

En fin, la propuesta está hecha, ¿que prefieren que recomiende?

Mientras tanto, cuelgo un video que escuché unas 3 o 4 veces mientras escribía esta entrada.

Es una versión de Ain't no sunshine por Freddie The Texas Cannonbal King, -alto blusero-.

Para mí esta versión la rockea y el look del bajista no puede más, es todo.